Hace unos días comenzo Octubre y me ha costado mucho trabajo empezar de nuevo, he perdido mi condición física ya que Septiembre para mí fue un caos: los primeros 10 días tuve una horrible infección de vías urinarias que me freno por completo mis días (fiebre, migraña, cuerpo cortado, vómito, nauseas y falta de apetito) para poder superar esta infección necesite de 6 inyecciones las cuales me dejaron adolorida por más de 15 días.
Posteriormente los festejos, compromisos sociales y estados depresivos me han distraído de mi estado físico. Después de la enfermedad realmente moría de hambre, pues en el período de enfermedad no quería comer nada, una vez superada quería devorar todo, admito que complací mis caprichos sin importar las calorías, pero lamentamente avivé mis debilidades y hasta el momento no he podido controlar mi ansiedad por consumir carbohidratos, chocolates y mi debilidad principal (cosas con chile, limón y sal).
He vuelto a mi rutina de ejercicios y para mi sorpresa he perdido gran parte de mi condición física, pues me canso más rápido en la elíptica, pero a pesar de todo mi cuerpo ha sido generoso conmigo no he aumentado de peso, pero tengo miedo de que al seguir comiendo como lo he estado haciendo, suba de peso nuevamente, por lo que tanto trabajo no habrá valido la pena, deseo controlar mi ansiedad por comer y mi último plan ha sido sustituir esos antojos por frutas, pero aún así no he podido librarme del antojo de carbohidratos y termino comiéndolos.
Estoy perdida y trato de recuperar mi entusiasmo para volver a los buenos hábitos, ya que estos sólo se adquieren con constancia y disciplina.
Me encuentro retomando el camino...
Posteriormente los festejos, compromisos sociales y estados depresivos me han distraído de mi estado físico. Después de la enfermedad realmente moría de hambre, pues en el período de enfermedad no quería comer nada, una vez superada quería devorar todo, admito que complací mis caprichos sin importar las calorías, pero lamentamente avivé mis debilidades y hasta el momento no he podido controlar mi ansiedad por consumir carbohidratos, chocolates y mi debilidad principal (cosas con chile, limón y sal).
He vuelto a mi rutina de ejercicios y para mi sorpresa he perdido gran parte de mi condición física, pues me canso más rápido en la elíptica, pero a pesar de todo mi cuerpo ha sido generoso conmigo no he aumentado de peso, pero tengo miedo de que al seguir comiendo como lo he estado haciendo, suba de peso nuevamente, por lo que tanto trabajo no habrá valido la pena, deseo controlar mi ansiedad por comer y mi último plan ha sido sustituir esos antojos por frutas, pero aún así no he podido librarme del antojo de carbohidratos y termino comiéndolos.
Estoy perdida y trato de recuperar mi entusiasmo para volver a los buenos hábitos, ya que estos sólo se adquieren con constancia y disciplina.
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