jueves, 10 de junio de 2010

El sobrepeso por cuestiones emocionales.



El sobrepeso tiene causas que a veces nosotros mismos desconocemos o bien nos cuesta trabajo aceptar, mi experiencia personal es la de una chica cuya complexión ha sido delgada por años, recuerdo la silueta de mi cintura perfecta, me solían llamar: la chica de la cinturita de envidia, y así fue por muchos años. Carecía de grasa abdominal y una cintura perfectamente acentuada. En aquél entonces no me gustaba consumir ningún producto que estuviera sumergido en grasa, los típicos alimentos que encuentras en la calle: quesadillas sumergidas en aceite, empanadas, churros, carnitas, etc. Siempre pensé que sería delgada, recuerdo las recomendaciones de un gran admirador de una de mis tías quien tenía una complexión musculosa pues se entrenaba en el gimnasio a diario y tenía los brazos con la apariencia de piernas, él solía decirme que tenía una figura envidiable y muchas de las chicas con las que convivía en el gimnasio matarían por una figura como la mía, me recomendó ejercitarme para conservar tan estética figura ¿Le hice caso? no, pensé que eso de engordar jamás me pasaría a mí.

Así paso mi vida universitaria, y después me gradué con un título de Ing. Química Industrial con especialidades en Ing. Ambiental, Capacitación y Adiestramiento así como un diplomado de Gas Natural, tenía mucha experiencia en ventas pues desde que tenía 18 años comencé a trabajar los fines de semana y en vacaciones como demoedecan y animadora para poder comprarme la ropa que quisiera. Cuando comencé en el campo laboral de mi profesión me enfrenté a muchas decepciones, ¡No era posible que con este título sólo pagarán $3000 al mes! por mucho $6000 ¡Imposible! yo ganaba más trabajando sólo fines de semana, hasta $700 por día, cuando eran vacaciones podía trabajar diario por lo que mis percepciones mensuales eran mucho mayores que lo que las empresas ofrecían con un título universitario. Bueno pero tenía que trabajar en mi área, así lo hice, me desempeñe con gran eficiencia en Ventas Industriales, pero ó no me pagaban mis comisiones (Por vender 3 veces más de las ventas base), ó la administración de ventas no cumplía con las políticas que ellos mismos implementaban. Para mí el servicio al cliente siempre será lo más importante, es mi filosofía de ventas: resolver problemas, atender a cada cliente sin distinción del tamaño de su empresa, todos los clientes son importantes. Pero las empresas no actúan igual, así que renuncié y cada renuncia me decepcionaba cada día más del mundo laboral, por lo que comencé a trabajar de manera independiente sometiendo a críticas innumerables, sin embargo no escuché ni las mínima de sus recriminaciones. Este proceso de decepción, cambiar de giro, me acarreo Kg. de más.

La comida rica en grasas puede ser un antidepresivo satisfactorio, te vuelves adicto a las grasas, no puedes parar, y cada vez que me sentía mal corría a comer cosas grasosas, llenas de carbohidratos sin tomar en cuenta las calorías o el riesgo de aumento de peso. Sé que esto no me ha pasado sólo a mí, existen muchas personas con sobrepeso que se refugían en la comida como compensador de dolor o consuelo a la tristeza y depresión. De pronto un día te ves en el espejo y ves una silueta deforme con depósitos de grasa. Cuando me dí cuenta seguía deprimida y pensé si ya estoy con sobrepeso por qué no seguir comiendo: pizzas, gorditas, hamburguesas. Pero seguí comiendo hasta pasar de 48 Kg. a 68 Kg. en tan sólo 2 meses e iba en aumento ¡20 Kg! ¡No podía ser posible! En fin ya tenía sobrepeso, pero esto fue más allá: evitaba ver a mis amigos por miedo al rechazo y a la crítica, todavía recuerdo un día me reuní con 2 amigos y 1 amiga y ella me dijo: ¡Ya estas lista para ser el pavo de navidad! Ese comentario me hirió y no quise volver a verla, ni a ella ni a nadie, me aisle 2 años. Sólo tenía contacto con mis amigos por telefóno, sólo podía ver a mi pareja quien me apoyo enormemente emocionalmente, tuvo que soportar mis depresiones, mi tristeza, y sentirme la mujer más fea del planeta. Por eso sé que él era el indicado pues sus palabras fueron ciertas: él no estaba conmigo sólo por una linda figura sino por mí por lo que soy, lo interno, mi forma de ser, mis valores, virtudes y hasta defectos, sus sentimientos eran reales.

Pero un día me harte de autocompadecerme y decidí hacer algo por mí, recuperar mi autoestima, el amor por mi misma, tenía que demostrarme mi amor hacía mi, así fue como comenzó este blog: la experiencia de bajar de peso. Sé que tal vez 1 persona lee mi blog, sin embargo creí necesario compartir esta experiencia de lucha contra los Kg. de más, escribir sobre mis avances relatandolos a personas personas, me daba más fuerza para no perder el objetivo: bajar de peso.

Y me sirvió pues en una ocasión escribí en mi blog que si yo ya no escribía en este blog es porque me había dado por vencida y me había conformado con ser gorda y seguiría con mi autocompasión, sin embargo sabía que alguien podía leer este blog y sentía un gran compromiso con esa persona que llegará a leerlo, no quería darme por vencida pues tal vez esa persona estaba pasando por lo mismo que yo.

Quería dar esperanzas a mí y compartirla con otras personas que aunque no conozco, de no darse por vencidos en este proceso tan difícil por la parte emocional: bajar de peso.

Ahora que he bajado Kg. y tallas y me veo esbelta y aunque no he quedado satisfecha sé que el camino aún no termina, pues vivir saludablemente es el camino que recorreré por amor a mi misma toda mi vida.

Hacer ejercicio me ha proporcionado mayor estabilidad emocional, seguridad, y es la manera en la que le demuestro a mi cuerpo lo mucho que lo quiero y por ello no me olvido de él, dándole su mantenimiento diario, pues es este el cuerpo que me acompañará toda la vida y deseo que sea lo más saludable y ocasionarle la menor de las molestias pues suficiente tiene con todo lo que proporciona, por lo que deseo corresponderle de igual forma.

Gracias a todas las personas que han leído algún apartado de mi blog, gracias por ayudarme indirectamente a hacer de mi compromiso para bajar de peso una realidad con constancia y disciplina.

Gracias, en verdad gracias.

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